Lo que cuesta enchufarse, pillar esa dinámica de correr de madrugada, nadar de noche, pedalear con frío y agua. Y lo poquito que cuesta soltarla. Me pasa siempre igual, en cuanto que tengo que hacer reposo, salir de él me cuesta un mundo. A miércoles estamos y sin haber hecho nada de nada, caundo esta semana quería haber retomado dedicaciones.
Cierto es que he tenido cosas que hacer, y que el reposo de estos días tampoco creo que venga mal (la rodilla sgue pelín hinchada y la herida no suelta el costrón ni p'atrás). Pero de estar enchufado y con "picores" por sudar he pasado a un molicie total, fugazmente alterada apenas por la media del domingo.
Y es que eso de atrasar un horita el despertador... lo que cuesta volver a adelantarlo.
Me cuesta, me cuesta un güebo y parte del otro arrancar cuando he parado. Y cuanto más tiempo paras, más cuesta. No sé si es la mezcla de la socorrida astenia primaveral, cansancio acumulado, molestias varias... o simplemente un paso o peaje obligado en el camino; no todos podemos mantener "la tensión" durante tantas semanas.
Uno, que flojea.
miércoles, 4 de marzo de 2009
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5 comentarios:
A mi ha sido venir el fresquete de nuevo y estoy ligeramente más activo. Sobretodo comparado con las dos últimas semanas que estaba que arrastraba los pieses todo el día
Dicen los que saben (no de triatlón sino de biorritmos, cuerpos y energías) que el cuerpo humano tarda 8 días en adaptarse a nuevas rutinas. Pero yo en dos días soy capaz de acostumbrarme a sobar de 11 a 9 y ...como dios.
Ni lo pienses que es peor.. ENTRENA Y YA, SINO DA MAS PEREZA...
Seguro que este parón te viene bien, el cuerpo lo agradecerá.
Estoy contigo en eso de que el cuerpo se acostumbra pronto a lo bueno, pero cuesta volver a la rutina.
Te veo sufrir, tron, con algo que se supone que es un hobby.
¿No crees que ha llegado el momento de tomarse esto un poco menos en serio?
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