viernes, 10 de noviembre de 2006

10 días horribilis.

Así han sido. Laringitis infantiles, noches en vela, subidón de curro con jornadas de 7 a 9 con parada pincho-tortilla, coche en taller, lluvia torrencial... en fin, 10 días de parón deportivo, y agotamiento total, lo que se dice un desastre.

Pero todo llega, y el final de este túnel también. Jueves festivo, soleado, niños sanos y salida a rodar 10 kms sin reloj pisando charcos por el campíviri. Mejora mi humor, que durante estos días ha estado bajo mínimos.

A ver si retomamos la actividad, centramos algún objetivo motivador... por cierto, ando de negociaciones en casa, se me está metiendo venenosamente en el microscópico espacio que tengo entre ceja y ceja el retomar el mundo triatlético "a lo bestia".