viernes, 26 de octubre de 2007

Titán. Fotos

Pues eso.

Chicas ...lo lamento, estoy ya casao :-)








lunes, 22 de octubre de 2007

Dos semanas de tocobolo

Como los que saben. He parado del todo durante un par de semanas. Aquí se acaban los parecidos, porque la verdad es que meterme en un gimnasio, hacer multisaltos, etc... como que no me veo, mis ganas de mejorar no dan para tanto.

Dos semanas que han servido, entre otras cosas, para:
- hincharme a jugar con mis cachorros
- cascarme un bodorrio y un par de salidas crápulas
- recebar como un puerquillo
- convencer a mi santa (y a otro incauto) para Lanzarotear en mayo
- hacer esas mil y pico labores a las que nunca puedes ponerte porque tienes tu mínimo tiempo "libre entrampao"
- y... tener unas ganas locas de sudar ya mismo.

Así las cosas, el viernes una primera salida probatoria de 10 km en 46', con las sensaciones habituales cuando uno receba. Si bien como el nivel de partida era 1 (sobre 100), pues como que no he perdido demasiado. Y hoy, vuelta a la madrugá, una horita larga con buenas sensaciones. Las que uno siente cuando la temperatura baja.

Primeras citas otoñales:

Media de Moratalaz
10 km de Rivas

Las dos con premio gastronómico posterior, que pa'eso voy.


martes, 16 de octubre de 2007

¿Planes?

Suele ocurrir. Cuando te comes la zanahoria, ese regalito que tenías delante de las napias y que te lleva hasta ese puntito ilusionante... pues te quedas "raro". Aunque no te lo hayas merecido demasiado. Y a la que pillas 2 horas en las que parar... ná, a pensar en qué fregao meterte.

No muy amigo de planes a largo plazo, tengo uno que a día de hoy me ilusiona: Lanzarote. No es un secreto, el año pasado ya me ponía berraco pero lo descarté por duro y por logística "enanil". Este año, superado el huracán del Ironcat y el primer año de cole de mi pequeñaja, esa que me deshidrata a babazos y que se ha llevado a casa en un cesto todos los virus del kit de debutante en guardería...

...le tengo aún más ganas.

(Hago un inciso para aconsejaros que os piréis toooooodos los miles de millones de ironmánicos que aquí entráis al Ironcat, aprovechad que me llevo el viento a otro lao...)

Cuento ahora con un apoyo que antes, sin dejar en el fondo de tenerlo, era como... como más abstracto. Cuento un secretillo: María, la que me lleva aguantando un carro de años y sigue aguantando mis caprichillos "pseudovigoréxicos", se enteró de las distancias Ironman unas 2 semanas antes del día "D", cuando me preguntó que a qué hora acababaría pensando en tomar juntos el vermutito :-(A su bronca se unieron la de todos los que me aprecian y no comparten afición por el tema.

Ahora, una vez visto que sobrevivo - algo puntúa esfuerzo del menda lerenda en sus dosificaciones y disimulos - parece que le hemos quitado un punto de dramatismo al tema y empieza a verlo de otra forma. Algo similar a cuando corrí el primer maratón, que fue el inicio de una sarta de ellos.

Bien. Hemos llegado al punto G. Sé lo que me apetece y tengo apoyo. Casi ná, aunque ese apoyo habrá que currárselo como el año pasado, a base de no impactar demasiado en aspectos mucho más importantes que cualquier Ironman.

Pero... ¿cómo hacerlo / prepararlo? ¿Cómo el año pasado, al tún-tún? ¿Bajo cierta tutela? ¿A acabar? ¿A hacerlo bien? Por el camino... ¿hago lo que me dé la gana a costa de llegar petao?

Por un lado me tira el ir a mi bola, haciendo en cada momento lo que pueda-quiera, como siempre he hecho. Por otro... me gustaría optimizar el poco tiempo de que dispongo.

Dubito, ergo me voy a tomar unas cañas.

lunes, 15 de octubre de 2007

Resumen de un año

A lo tonto a lo tonto... hace casi una añito que abrí este chiringo. Ha sido un año de luces y sombras, aunque en lo deportivo no me quejo.

Descartados ya grandes rendimientos y con la capacidad de sufrimiento redireccionada a acabar, no a "bajar de". No digo que sea la mejor, que cuando he bajado de 3 horas en maratón o he hecho las medias a menos de 4'/km me ha gustado tanto o más que acabar carreras largas a ritmos gasóleo calefacción. Pero es que ahora mismo me da una pereza tremebunda andar buscando una chispa que a mí siempre me ha costado un mundo encontrar. Y cuanto más viejo-pellejo, más trotón se hace uno.

Centrándonos en lo deportivo, resumo:

Un par de 10.000's en octubre-noviembre. Rondando los 40', más por pasar la mañana con amiguetes y como previo al vermutito de rigor.
Una media maratón (Moratalaz) al tran-tran, en compañia de un amiguete para hacer hueco para un risotto con setas :-)
Duatlón de Alcobendas. No estaba mal de forma pero me encontré fatal, es una carrera demasiado explosiva para el tipo de "entrenamiento" que yo hago y para mis características. No creo que repita, además de dejarme pa'l arrastre ví mucho bache, mucha rotonda y mucha peña que no sabe trazar una curva.
Duatlón de Fuenlabrada. A éste me apunté fuera de plazo, en muy mal momento anímico y por distraerme un poco. Y curiosamente, quizá sea la carrera que mejor me ha salido este año; supongo que por la "supercompensación" de los días anteriores; muy cansados pero sin esfuerzos deportivos.
Ironcat. 15 días después, y con un enfoque - que ya de por sí poco ambicioso - que se hico más ultra-conservador. Muy buenos días con la prole. La carrera, totalmente condicionada por el viento, muy dura. Y aquí, el menda, que pesa lo suyo (unos 75-76 de aquella, ahora no lo digo) lo pasó menos mal en la bici que los "silbidillos"
de menos de 50 kilos, que a esos se los llevaba el aire. Lo acabé, disfruté mi momento (mi caprichito, María dixit) y llegué bastante bien.
Pálmaces. Este, como tenía referencias de hace unos años, si pretendí hacerlo algo mejor. Pero en medio de la molicie estival, no estaba para alegrías. La bici, donde pensaba hacerlo bien, me salió fatal. Gili-pinchazo incluído, eso sí. Como evento, de lo mejor, por el ambiente y la compañía.
Titán. Para mí, lo mejor del año. Carrera preciosa, dura de cojones, en un entorno sencillamente espectacular. No va con mis características pero sí plenamente con lo que me gusta y con lo que le pido a una carrera. Muy mal tiene que estar la cosa (mis patas y/o la logística hogareña) para que no me vean por allí en el 2008.


Este año no sé como planteármelo. Sopesaremos matices y decidiremos.

miércoles, 10 de octubre de 2007

Titán 2007

Una vez acabado el Ironcat, sentí el vacío que suele dejar tal esfuerzo y recompensa. Por un lado quieres seguir "dándote cera", por otro no encuentras justificación para machacarte a costa de horas de sueño y, sobre todo, de la familia. Me repito más que el ajo, pero es cierto; la infancia son dos putos días y si te descuidas ves llegar el momento en que tus enanos tienen ya pelos en el sobaco. Y yo quiero hartarme de disfrutarlos en estas edades.

El caso es que tras un verano rezongón en lo deportivo, tras la segunda quincena de agosto, en la que cogí bastante la bici (para mi escala de dedicaciones) , me puse la zanahoria del Titán delante. Uno es así de masoca. Y a ello. A ello ha sido salir con la bici lo que he podido, intentando hacer puertos. Ni una sóla brazada desde Pálmaces, no más de 6 salidas a correr. Mi intención era acabar la bici entero. Con eso y dosificando en la carrera a pie, contaba con acabar.

El planteamiento ha sido el ver el Titán como un premio. Y así ha sido, un premio gozoso que, unido a la gratísima compañía de un numeroso grupo aguaverdiano y a unas minivacaciones con María, ha sido de lo mejor del año. La carrera me parece dura pero muy recomendable. Desde el momento que coges el dorsal hasta que te llevas el último trasto de boxes, te sientes mimado por la organización. Yo debo ser muy mimosote, pero son estas carreras - en las que somos pocos y bien avenidos - la que me gustan.

El transcurso del día en sí:

Agua
Tal y como tenía previsto, salgo el último, a intentar nadar tranquilo sin cansarme mucho. Lo consigo, la segunda vuelta la paso a los pies de otro nadador muy muy tranquilito. La transición, jodidilla, un repecho largo y duro para llegar a boxes donde me tiro una jartá de minutos poniéndome "el ajuar".



Bici.
Salgo, como todos, regulando e intentando llevar las patas "sobradas". Aprovecho los primeros metros para tripear unos sandwiches que me he preparado en la casa y un plátano. Soy como los coches grandotes de gasolina, necesito mucho combustible para andar. Los primeros repechos que llevan al puerto de Las Palomas, bordeando Zahara de la Sierra, cuestan. Miro el pulsómetro y veo que voy un poco alto. Suelto desarrollo, que esto es más largo que una meada en una cuesta. Durante unos kilómetros, el objetivo es ir entrando en calor, algo que a mí me cuesta bastante. Como nado tan sumamente mal, paso a bastante gente en la bici. El puerto, a esas horas de la mañana, es espectacular. Mirando hacia adelante se ve una sucesión eterna de rampas zigzagueantes hasta la cima. Sigo subiendo, adelantando gente continuamente, con ritmo muy cómodo con el 39x24, subiendo sólo al 27 cuando la pendiente aparentaba andar por el 10%. Tras coronar, breve bajada hasta Grazalema. Es de las pocas cosas que no me gustaron, las bajadas que no eran propiamente la de los puertos. En todas me encontrá a algún tarugo al volante que hizo que las hicera frenando contiuamente. Coño, para un sitio en el que se puede ir deprisa me toca bajar a menos de 40 km/h viendo el culo de un Toyota Corolla.Tras la bajada, una breve ascensión al alto del ¿Alamillo? No muy dura, pero de esas que no sabes muy bien que desarrollo poner ni si ir sentado o de pié. Luego, sucesión de toboganes, alguna subidilla pestosa y alguna bajada disfrutona en la que siempre me encontré a un tarugo tocando los huevos.
Llega el desvío para enfilar el puerto de Boyar. Téoricamente menos duro y más largo. Lo segundo es seguro, lo otro no lo sé, yo el segundo puerto siempre lo hago como puedo. No tan suelto como en la primera subida a Las Palomas, sigo con buenas sensaciones y pasando gente. Aquí tiro bastante del 27, por preservar canillas a costa de ir más despacio. El tiempo me daría la razón. Empiezo a ver ya a algunos cadáveres, que van auténticamente clavados y al minuto de pasarlos ya no los veo al mirar atrás. Corono el Boyar. Subidón, están las pomponeras aguaverdianas animando y entre eso y que me encuentro perfecto veo que esto va de puta madre.


Bajada. Breve, muy breve, lo justo para estirar las canillas y a al poco... vuelta a Las Palomas (Las Palomitas lo llaman). Unos 3-4 kms realmente duros pero preciosos. Sigo pasando gente, veo ya a algunos que se han bajado de la bici, otros van clavados.
Coronamos. Comienza la bajada. Y para mí el peor momento del día. En la primera curva cerrada, un chaval que prácticamente me ha marcado el ritmo de los 18 kms de ascensión (lo tenía a unos 20" por delante todo el tiempo) frena en la curva, se le cruza la rueda trasera, pierde el control y se pega una toña con el pretil de piedra que me deja acojonado. Como la de Beloki hace unos años en el Tour. Si cae por el precipicio, no lo cuenta. Entre otro chaval y yo le levantamos, avisamos a los que vienen por detrás, le limpiamos las heridas y tras un rato a ver si se recupera del susto le dejamos ahí, parece no haberse roto nada, ni él ni la bici. Creo que luego acabó.
Sigo bajando, con las lógicas prudencias de quién ha visto un hostión tan de cerca. La bajada es puñetera y se hace larga. No se puede ir muy deprisa y la tensión y el agarrotamiento de brazos y espalda también cansan. Por fín se llega abajo. Aprovecho los únicos 500 metros llanos para comer y beber, ahora viene lo que menos me apetece.

Carrera.
Transición menos lenta que la anterior. Bebo bastante en el primer puesto. Meo, aún clarito, buena señal. Mi ritmo, muy lento, calculo que debo ir a 5'30"/km. Mi idea es ir sobrado. Y así voy durante los primeros kms, sin ninguna molestia y entero. La subida a Algodonales se hace larga, noto mucho calor - que no me va nada - y sed. La bajada de Algodonales, bebiendo y mojándome, no me sienta muy bien; veo que milagros no hay y que lo poco o nada que he entrenado la carrera me va a pasar factura. No pasa nada, queda poco. En el repecho de subida a la presa, echo a andar. Es largo, hace calor y voy alto de pulsaciones. Además, veo que andando deprisa castigo menos las patas y voy a velocidad similar que otros corredores que siguen trotando. Recupero en la presa, bebo y corro, esta vez a un ritmo cojonudo por el simple hecho de que veo que están tirando una foto y me hace ilusión tener una con los dos pies separados del suelo, que siempre salgo como un armario. Ya no queda ná, las cuestas "de la risa" finales. Ya el día anterior, al subirlas en coche, decidí subirlas andando. Y así hago, alternando con algún trotecillo, para llegar a un meta preciosa, bastante entero y muy contento.





Allí está María con el resto de animador@s y compañeros del Aguaverde que han llegado hace ya una hora, jodías máquinas :-)
Los momentos posteriores, también gozosos. Cervecitas que, sin ser Mahou, entran bien en compañía de toda la cuadrilla. La vida tiene estos placeres.





Carrera 100% recomendable, por todo. Y corto el rollo. Por este año cerraremos el chiringuito. Creo.

jueves, 4 de octubre de 2007

En capilla para el Titán

Pues eso, como decían en la puta mili, mesías (me quedan días), lavadora (me quedan horas). Qué tiempos, que grandes enseñanzas obtuve de esos meses, qué hombre me hice...

Esta semana esta siendo bastante jodida, de llegar muy pronto al curro y muy tarde a casa. Al final he conseguido sacar un par de horas para coger la bici el único día que no llovió, el martes. Con buenas sensaciones, por cierto; recorrido durete (55 kms subiendo unas 4 veces el Cristo de Rivas) realizado en mismo tiempo que otras veces pero con unas cuantas pulsaciones menos.

Correr, nada. Nadar, tampoco. Unas molestias que tengo en la rodilla hacen que no me importe demasiado no salir correr. Perfiero ir más corto que con una rodilla dando por el ojete; a estas alturas "poco hay que ganar y mucho que perder".... je jer, esta frase y la de que "la cerveza es buena para el deportista" nunca debiera haberlas oído. Me ha hecho tanto daño como Fernando Alonso a los conductores de Seat León amarillos.

Así las cosas, voy:
- Mal en natación. Desde Pálmaces ni un metro. Saldré el último a intentar hacerla relajadamente. Calculo que unos 45'.
- Bien en bici: Llevo unas últimas salidas con buenas sensaciones. Pero la ruta se las trae, y vaciarse puede dejarte muerto en la carrera a pie. Calculo 4.30'
- Regular corriendo. Siendo generoso, porque ando un poco paquidérmico. He corrido muy muy poco, poquísimo este verano. Así que pondremos el chip gasóleo calefacción, olvidaremos los tiempos de cuando uno se hacía la distancia en 1.22' y a ver si en un par de horas solventamos el tema.

Así las cosas... joder, ¡me dan las 5 de la tarde! Bueeeno, intentaremos aligerar algo, que se me duerme mi media mandarina. Pero el objetivo es acabar, y acabar entero; para tener que montar un número en meta prefiero no llegar.

Un dato bueno (donde hay que firmar):

lunes, 1 de octubre de 2007

Penúltima antes del Titán

L- Tocobolo
M- Bici. 55 kms con 4 subiditas al Cristo de Rivas, buen ritmo y buenas sensaciones.
X- Trote. Palomeras - Peineta i/v, unos 19 kms que consigo hacer a 4'30"/km, pero a duras penas.
J- Tocobolo
V- Trote. 10 kms en 42'25" acabando descojonao.
S- Trote. 12 kms en una horita, de madrugá.
D- Bici. Unos 100 kms de bici con la grupeta aguaverdiana, un auténtico lujo. Sensaciones de menos a más, acabando fuerte.

Resumiendo:
Buenas sensaciones en la bici.

Corriendo han mejorado bastante en un par de semanas, lástima aquel puto impétigo; podría estar con un puntito más que me diera plena confianza en acabar.
Nadar: ni un metro, ya me acordaré.

Lo peor, del viernes por la mañana a lunes por la mañana he engordado ¡4 kilos!. Es lo que tienen, los saraos y el cordero. Menos mal que estos que se ponen rápido se suelen quitar también en seguida (oremos).

Para esta semana, a ver si puedo sacar un rato para cada cosa, al tran-tran, y solucionar las típicas cosas que nunca me da tiempo a hacer con calma: revisar la bici, ir al fisio... logísticas varias. Y, como ocurre en estas tesituras, con curro a entregar "para ayer".

Pego fotos de la salida dominical, más que nada para que veáis mi "mítico" maillot del Superconfex.