jueves, 10 de abril de 2008

Dedicación (ii).

De todos es sabido. Hay que entrenar, y mucho, para poder hacer triatlones dignamente. Pero... depende. Vaya por delante que debo ser el tío que menos sabe de como entrenar un triatlón, uno hace lo que puede cuando puede y eso es para uno más que suficiente. Pero sí que más o menos he llegado a conocer como reacciona mi cuerpo. He preparado maratones al tran tran, con alguna carrerita por el medio, y me han salido bien. Los he preparado más concienzudamente, controlando el peso, metiendo calidad y volumen, visitando fisios y me han salido... igual.

A lo que voy, y esto es un plagio de una frase que le escuchaba a Carlos Llanos, cuando esporádicamente me pasaba por La Peineta a sudar con la buena compañía de los del Páris, es que "hay que entrenar lo que se asimila". Es de perogrullo, pero es así. Yo, con mis poco más 5 horas de sueño y resto de obligaciones, soy incapaz de entrenar muchas horas, y menos con mucha intensidad. Y si lo hago, es como acelerar en punto muerto.

5 comentarios:

Ishtar dijo...

Eso es algo que todo el mundo dice, pero ¿cómo sabes cuánto puedes asimilar?. Lo mismo piensas que no entrenas mucho y un día tu cuerpo peta por sobreentrenamiento. O lo mismo piensas que estrenas mucho, que no puedes con ello (u otros lo piensasn) y un día sobrecompensas y vas como un tiro ;-).

Vamos, que sobre eso podemos teorizar o imaginar, pero no podemos saber a ciencia cierta hasta dónde somos capaces de estirar la cuerda (siempre que se haga con un razonamiento detrás y sin hacer burradas, claro, pero digo que lo que puedas pensar por la teoría, puede tener ligeras desviaciones en la práctica).

Otra cosa es lo que tu mente aguante, que eso es más controlable y tenemos una percepción más clara de sus signos;-)

Muy complicado esto del entrenamiento...

Besicos!

magopepo dijo...

Hola Maca, muy buenas.

No puedo estar más de acuerdo contigo. Claro que encontrar ese puntito justo, de perfecto equilibrio entre entrenamiento y descanso, entre esfuerzo y asimilación, sería lo ideal. Pero puestos a mirar a nuestro alrededor, mi impresión es que para uno que se queda corto hay nueve pasándose de entrenamiento.

En todo caso, nano, tú disfruta en LZ, que al final se trata de eso y poco más.

Ilusionados saludos

Sergio dijo...

jejeje, ahora mismo a mi me encantaria petar por sobreentranamiento :-), por aquello de poder entrenar muchas horas.

fiuuuu, fiuuuu... ¿lo escuchas? es el viento de Lanzarote.

emonje dijo...

Jodo Pepo, a mi me lo vas a decir. Vengo de nadar de la piscina y me ha tocado en la misma calle con 9 de "los que se pasan".
Animo Maca que vas sobrao de motor...aunque aceleres en punto muerto, como entre la primera la lías !!!

Macario dijo...

Esther, seguramente todos tenemos un nivel que ni nos imaginamos, de puro bueno que puede llegar a ser. Pero para llegar a él se tienen que dar un conjunto de condiciones que, siendo realistas, no vamos a ver. Y, empíricamente, se descubren limitaciones. Lo que comento es mi experiencia. "Como bajé de 3h en un maratón entrenando muy poco y a mi bola, si me a plan me salgo". Y no. Cuando lo hice estaba más delgado, más cansado y muy muy poquito más veloz. Pero bueno, esto es eso de que "cada uno cuenta la feria como le va". Complicado atinar, desde luego es.

Pepo, ese equibrio... es chungo chungo de pillar. Mi impresión no es tan radical (1/9), pero sí que veo, sobre todo a nivel popular en carrera a pie, que sobran ansias por "bajar de". y se paga, principalmente en desmotivación a medio plazo. Lo dice un pecador.


Sergio, de sobreentrenamiento no petaras, pero como haga viento (90% de posibilidades) te se va a caer en la cabeza un tas (yunque de platero, uno que hizo la mile aprende estas cosas). Mamón.

Esteban, vente a donde nado yo. Soy el más rápido, no te digo más, a mis 24' cada 1000 doblo sirenas cada medio largo. Gracias por los ánimos. Espero que no me haga la picha un lío y meta "la marchatrás".